Es habitual que, el Ser Humano, desde una concepción equivocada de su propia naturaleza, así como de su posición real sobre nuestro planeta, se separe psicológicamente del Medio en que habita y del que, de hecho, forma parte inseparable, aunque quiera pensar que no. Este distanciamiento entre los Humanos y su entorno ha propiciado el nacimiento de estructuras de Gobierno ineficaces por lo absurdas, como es el caso de crear Organismos, de distinto rango y ubicación funcional, -según los países y circunstancias- dedicadas, unas, a la protección de las Personas y de sus bienes y, otras, a la protección y cuidado del redundante concepto “Medio Ambiente”. (En este caso, el Medio y el Ambiente, son una misma cosa).
INNOVACIÓN DEMOCRÁTICA entiende que la consecuencia de la separación de los elementos a proteger y/o a cuidar, es que, cuando suceden acontecimientos indeseables, tanto de índole natural como los provocados por el Hombre, no se resuelvan adecuadamente y se produzcan las tan temidas e indeseadas catástrofes. (Se llega a la situación de catástrofe cuando un hecho calamitoso o una calamidad pública, está tan mal resuelta que sus efectos dañinos son amplificados, prolongados en el tiempo y agravados por esa ineficiencia a la hora de poner los medios para resolverla).
INNDE cosidera que eso es lo que ahora ocurre debido al planteamiento actual de las estructuras Gubernamentales, desde los Municipios, hasta el propio Estado. Se nos tiene acostumbrados a que, cuando se presenta una situación de grave riesgo o se produce una calamidad pública, se creen Órganos de gobierno Locales, Provinciales, Comunitarios y/o Estatales “ex novo”, dejando de lado a los Organismos que, en teoría, y en las estructuras de los propios gobiernos, así como en el espíritu de las Leyes, serían los encargados, de facto, de resolver esas situaciones pero que, por estar separados y compartimentados -y por ello inconexos dentro de un escalafón de poder erróneo- cada uno de ellos y todos en su conjunto, están absolutamente faltos de criterios operativos eficientes. Consecuencia de todo ello es que los integrantes de las llamadas “mesas de crisis”, los “órganos de coordinación”, etc. -creados precipitadamente para la ocasión- no están, en absoluto, preparados ni intelectual ni técnicamente para hacer frente a nada que requiera una fuerte especialización, así como para el mando y manejo de medios Humanos y técnicos preparados al efecto.
Todo este despropósito y falta de criterio político a la hora de planificar la estructura de las Administraciones Públicas, tiene como lógica consecuencia lo que estamos “acostumbrados” a ver y a sufrir cada vez que, en cualquier lugar de España, sucede algo que se sale de la normalidad: Un fiasco con una carga añadida de reproches entre los partidos políticos que, previamente, habían sido incapaces de prever estas situaciones y, consecuentemente, de organizar la Administración del Estado de otra manera mas sensata y racional. Y esta notoria ineficacia, conlleva sufrimiento y el consiguiente desencanto político entre la Ciudadanía.
Es por ello que, desde INNOVACIÓN DEMOCRÁTICA, pretendemos estructurar los Poderes Públicos de forma lógica, con racionalidad y economía de medios, sin duplicidades absurdas y con criterios integradores al respecto de “LA PROTECCIÓN CIVIL Y DEL MEDIO NATURAL”, situando a un ÚNICO ORGANISMO en las distintas Administraciones Públicas, en una posición tal que, desde su adecuado rango y grado de poder político y ejecutivo, permita una respuesta inmediata y sin vacilaciones, así como el ejercicio responsable de la acción de Mando, Control y Coordinación, lo más ajustada a la realidad y a las necesidades del momento.
Es por ello que, una “VICEPRESIDENCIA DEL GOBIERNO PARA LA PROTECCIÓN CIVIL Y DEL MEDIO NATURAL”, sería el lugar y rango idóneo para UN ÚNICO ÓRGANO DE GOBIERNO capaz de abarcar todo el espectro funcional, político y administrativo, con la posibilidad real e inmediata, de aplicar los planes de prevención de riesgos y las tácticas y la logística necesarios para la neutralización de los distintos acontecimientos indeseables que pudieran producirse y que, sin duda, se producirán.
La realidad que últimamente se nos presenta, es seriamente preocupante, con multitud de hechos calamitosos previsibles e imprevisibles pues, la irracional acción del Hombre sobre sí mismo, a través de la sobreexplotación incontrolada de todo tipo de recursos naturales y del Medio Natural, al propiciar todo tipo de acciones especulativas hacia los recursos, mínimos y máximos, que garantizan nuestra calidad de vida y supervivencia. Este hábitat maravilloso, nuestro planeta, nuestra única verdadera “casa”, al “sentirse” agredida, “trata” de reajustarse a sus parámetros geofísico-ambientales primigenios, y lo hace de forma convulsa en unos casos, o con cambios sutiles y progresivos en el tiempo atmosférico.
Por todo lo antedicho, sin olvidar el día a día, que llena de horror las páginas de sucesos de los Mass Media, INNOVACIÓN DEMOCRÁTICA, establece como altamente prioritaria, la captación y/o formación de los mejores Profesionales, para ocupar los puestos de máxima responsabilidad en los Organismos responsables de la “PROTECCIÓN CIVIL Y DEL MEDIO NATURAL”, porque es absolutamente necesario el saneamiento y adecuación de los Recursos Humanos de nuestras Instituciones a los tiempos que corren. A partir de esta estructura orgánica de los Gobiernos Locales, Autonómicos, Provinciales y del Estado, se terminaría con la espasmódica reacción institucional a que se nos tiene acostumbrados, de todo punto confusa e ineficaz. Lo aquí expuesto es una breve reflexión sobre el presente y un compromiso de futuro con TODOS NUESTROS CONCIUDADANOS.