Salve Regina

Salve Regina

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia,

vida, dulzura y esperanza nuestra;
Dios te salve.
A ti llamamos 
los desterrados hijos de Eva;
a ti suspiramos, gimiendo y llorando
en este valle de lágrimas.
Ea, pues, Señora, abogada nuestra,
vuelve a nosotros esos tus ojos 
misericordiosos;
y después de este destierro, 
muéstranos a Jesús,
fruto bendito de tu vientre.

¡Oh, clementísima, oh piadosa, 
oh dulce Virgen María!

.

,

.

.

Discover more from FAMILIA MUNDIAL

Subscribe now to keep reading and get access to the full archive.

Continue reading